Definitivamente debo enfocarme en mí, no en lo que quiero o deseo, sino en lo que debo de hacer, el camino de los logros por desgracia, no siempre está lleno de satisfacción o de libre albedrío; y a pesar de que ya me siento cargada de vivir de forma correcta o civilmente adaptada y mi atrevimiento me llevo a darme una oportunidad, debo poner en balance la clandestinidad de mi conciencia; Aunque honestamente todavía no veo los frutos de haber sido políticamente correcta.
Las decisiones adecuadas, no siempre resultan agradables y mucho menos beneficiosas, pero emiten un ligero alivio sobre estar en lo moralmente esperado.
Pero en el fondo de mi alma, sigo sintiendo que todo es un paquete estúpido, mal oliente de materia fecal.
Más correcto sería tener el valor de mandar el mundo al infierno, sumergir mis preceptos en un estanque de cloro y bañarlos en cianuro, más honesto seria utilizar la clandestinidad de mi conciencia, esa callada, fuerte frecuencia que a retazos morales he ido encerrando.
No niego el balance que en el universo existe, solo que quizás mi lapso, se ha pernoctado de forma eterna en un delgado camino donde el balance no existe y la justicia se convirtió en un sueño de chiquilla pobre.
Verónica Galla
Del Libro reflexiones
Instagram @vegallas
2 Feb 2015
Amiga, por suerte brinque un poco hacia el otro lado, no me arrepiento, aunque tienes que estar, debajo del manto de una supuesta sociedad y ciertas reglas, besos. Te quiero.
Un abrazo amiga, Dios te bendiga