Todos llevamos una mochila, según vamos viviendo vamos recogiendo experiencias sentimientos y los vamos metiendo en esa mochila pero la mochila se llena y hay que desprenderse de algunas cosas para seguir el camino, así que lo que no decides tirar y dejarlo en la mochila lo tendrás que cargar el resto del camino y algunas cosas pesan mucho como la culpabilidad, los errores, y otras aún más pesadas.
Si no eliges bien de que desprenderte y que conservar puedes llegar a cargar una mochila que no te dejarte seguir tu camino.
Yo suelo hacer limpieza y elimino siempre lo más pesado, tal vez porque sé que no tengo mucha fuerza o porque tengo la suerte de ver el lado positivo y eso me ayuda a llevar la carga.
Anónimo