La cafeína está considerada como un estimulante natural extraído de los granos de café o de guaraná, sin efectos nefastos graves para la salud (palpitaciones, desarreglos digestivos, o ansiedad en fuertes dosis en personas sensibles). Su uso en el mundo del deporte está cada vez más extendido.
En un estudio llevado a cabo con 10 ciclistas experimentados, con una edad media de 24 años, los investigadores han demostrado una vez más que la cafeína permitía mejorar los rendimientos.
Los resultados muestran que la cafeína aumenta la potencia de 2,4%, el bicarbonato de 2,6% y el consumo de los dos aumenta de 2,7%, lo que se traduce por unos rendimientos más altos (mejores tiempos en la contra reloj). Para los investigadores, el beneficio de la combinación de los dos elementos no es significativo.
Las dosis utilizadas por los investigadores son de 3 mg de cafeína por kilo de peso corporal (es decir 240 mg para un adulto de 80 kilos o con dos o tres cafés) y 300 mg por kilo de peso corporal de bicarbonato de sodio (es decir 24 g para un adulto de 80 kilos). Estos dos complementos alimenticios pueden provocar desarreglos digestivos, y para evitarlos, la cantidad de bicarbonato de sodio puede ser mezclada con agua, y bebida a lo largo del día.