La verdad es lo más obvio y lo más sencillo que hay en la existencia, esto ha provocado muchos problemas porque la mente no le interesa lo obvio, a la mente no le interesa lo sencillo, porque en el fondo, la mente no es más que tu ego y el ego, se nutre del desafío de lo que está lejos; Cuanto más arduo, torturante y difícil sea conseguir algo, más fascinara a la mente.
Me acuerdo de un comentario de Edmund Hillary quien fue el primero en escalar el Everest, la montaña más alta de los Himalayas, cuando descendió, los medios de difusión de todo el mundo estaban interesados en saber cómo había sido la experiencia, qué es lo que le había sacado a esa experiencia, antes que el, cientos de montañeros habían perdido la vida, intentando alcanzar la cima del Everest, Edmund Hillary, no puedo responder, se quedó en silencio durante un momento, después dijo “El hecho de que esté ahí, retando a la humanidad, es motivo suficiente para arriesgar la vida, pero no he sacado nada, no he experimentado nada” : la verdad es que cuando pienso en Edmund Hillary sólo, de pie en el Everest, lo imagino avergonzado, sintiéndose como un perfecto idiota, de hecho no estuvo ahi, más de 2 minutos y por esos 2 minutos, a riesgo la vida.
Esto puede dar una idea de la mente humana y su mecanismo, lo que no está nuestro alcance, lo que no se puede convertir en un logro y lo que no está a nuestro alcance, cuanto más lejos esté, más nutrira al ego. Lo obvio ya lo tienes, no tiene interés para la mente.
En la tierra han vivido millones de personas pero se le ha escapado su propio ser, algunos como Marco Polo, Colón, recorrieron el mundo de un extremo al otro y otros, como Alejandro Magno, intentaron conquistarlo pero todos se olvidaron de una cosa, ni siquiera se habían conocido sí mismo y mucho menos se habían conquistado.
Cuando Alejandro Magno estaba camino a la India oyó hablar de un hombre excepcional, Diógenes que vivía al lado del camino, Alejandro había oído historias acerca de este hombreque era una leyenda en su tiempo: Diógenes vivía completamente desnudo sólo con una lámpara.
Diogenes le pregunto a Alejandro Magno, Que te gustaria ser en el futuro? Alejandro nunca se había encontrado con un hombre asi, había derrotado grandes reyes y emperadores pero se daba cuenta de que Diógenes era como un león, bajando la mirada Alejandro le respondió “no puedo asegurar nada sobre el momento siguiente, lo que sí puedo decirte es que hay algo que me gustaría ser cuando haya conquistado el mundo, me gustaría descansar y relajarme como tú“, Diógenes estaba tomando el sol a la orilla del río renegado de hermosos árboles, se rió, Alejandro se ofendió y le preguntó De qué te ríes? Diógenes dijo, es tan simple, si yo puedo descansar y relajarme sin conquistar el mundo, que te lo impide a ti, el río es lo bastante ancho y no me pongo ninguna objeción, puedes escoger el sitio que desees para descansar.
Relájate ahora, recuerda ahora o nunca.
Osho, del Libro Creer en lo imposible antes del desayuno.