¿Quién dijo que estoy sola?
Por Verónica Galla
“Pena de aquellos que sienten tristeza, de no verme en compañía” Verónica Galla
Se hace muy constante entre mis amigos la pregunta;
¿Dónde están los enamorados?
¿ y no andas con nadie?
¿ No tienes ningún chico?
¿No pretendes tener a nadie? A esta pregunta le respondí a un amigo, me siento tan cómoda sola que no quisiera romper con esa tranquilidad que me brinda esta soledad seleccionada.
Estar sola es la única forma de conocerme a mí misma en lo más profundo de mi ser, es la única forma de adentrarme en las entrañas de mis demonios y darle luz a mis ángeles internos.
Nos pasamos la vida rodeados de personas, desde niños nos acompañan para protegernos y nos acostumbramos a tener una sombra con quien compartir, un ente vivo, que no nos deje caer en lo profundo de nuestra conciencia y hacerle frente a todos nuestro temores.
Para mí, la falta de compañía es esa puerta que me da cabida a la vida, y la llamo falta de compañía porque no me siento sola, anduve tanto sola que cuando me ligue con gente, descubrí que me estaba perdiendo la maravillosa oportunidad de conocerme, de poner en su lugar a mis demonios y darle cielo abierto a esos ángeles divinos que dormían en conciencia.
No es necesario salir corriendo buscando compañía, cuando falta una voz dulce que te indique cómo va la vida, unas manos fuertes cuando faltan los padres ni unos labios que te hagan sentir vida a cada segundo.
Cuando nos ofrecemos la oportunidad de vivir nuestras vidas por acción propia y sin aprobación ajena, nos acercamos cada día más a edificar una estructura solidad para vivir nuestras vidas.
Cuando no existe una constante opinión sobre lo que haces o no haces, surge en ti tu verdadera y mejor personalidad,“ la tuya”; La que siempre sabrá que es lo que más le va, lo que mejor le amolda.
Me he pasado la vida escuchando comentarios tales como “Esta sola, que pena” “! No tienes novio ¡”
“ ¿No tienes hijos?” “¿No te gustaría tener un hogar?:
Que me perdonen, pero yo soy un hogar.
Las personas con identidad se reconocen así mismas, no necesitan ser la media naranja de un limón para sentirse completa.
Verónica Galla.
Del libro Reflexiones.
Instagram @vegallas
10 Jun 2015