Volver a vivir, así llamaría yo a estas lindas palabras de la Señora, Alejandra Guzmán, Por que así debo llamarla, La Señora.
Hubo un tiempo en el que no podía parar mis lágrimas, pero levante la cara y entendí que no se puede vivir sin morir, ni se puede despertar sin dormir. En los momentos difíciles, recuerda que me tienes a mí. Mírame, me caí y me pisaron, pero no me aplastaron.
El dolor me golpeó, pero no me rompió. El día para mí se apagó, pero entendí que la noche no era oscura, era de lentejuelas. Porque la vida es así, y se valora mejor lo bueno, lo hermoso y lo simple, cuando eres un sobreviviente.
Porque la comida es más rica cuando se tiene hambre. Un brazo te conforta cuando el alma llora. Porque te aferras más a la vida, cuando sientes la agonía. Y las migajas son tesoros cuando no se tiene nada. Y ese entonces, cuando te fundes con el que te dio, aunque sea una mirada, porque si fue de compasión o despiadada, esa mirada hoy a mí me levanta. Y les digo a todos aquéllos que me odian, y a los que me aman, que gracias a ellos estoy aquí, de pie ¡Más fuerte, y más cabrona! …De la que era, antes de caer, y que los amo, los amo, porque sea como sea, para mal o para bien, todos me miran.