¿Cómo la alimentación influye en el estado de ánimo?
La alimentación malsana altera las funciones metabólicas y hormonales, lo que afecta al estado de ánimo y causa irritabilidad.
Elegir menús y dietas radicales que excluyen grupos enteros de alimentos, así como los que prohíben el consumo de hidratos de carbono, por ejemplo, altera el metabolismo y los niveles de energía, haciendo que la persona experimente momentos ocasionales de ira.
Además de estos efectos, el consumo excesivo de grasas también reduce los niveles de triptófano, precursor de la serotonina, el neurotransmisor del bienestar, conocido como “hormona de la felicidad”.